Mi padre

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19 de marzo, Día del padre.

El día del padre son todos los días del año, es decir, toda tu vida.

No recuerdo un solo día en que no haya recordado a mi padre, o alguna frase suya, o ver un objeto y que este no me devolviera su recuerdo. Han transcurrido más de 10 años desde que se fue, pero el transcurso del tiempo no ha minimizado la intensidad de su ausencia.

La vida es así, nacemos, vivimos y morimos. Pero no nos enseñan a convivir con la muerte. Aunque, también es verdad que no es que nos enseñen mucho a vivir y convivir con los vivos.

Yo hace mucho que no rezo, ni pido, ni hago las cosas conforme a religiones o credos. Sin embargo, hablo con mi padre, sueño con él, y resuelvo los problemas pensando en su forma de resolverlos, pero no porque yo fuera una persona dependiente de la figura paterna y necesitara su visto bueno, no, no es nada de eso. Es porque siempre aportaba una carga de sabiduría. Discutíamos muchísimo, precisamente porque yo defendía mis posturas a ultranza y me enfrentaba a las suyas. El tiempo me ha demostrado, en infinidad de ocasiones, lo acertado de su pensamiento y lo errado que era el mío. El aprendizaje de la propia vida, el magisterio que otorga la adultez.

Ahora, ya no puedo discutir, pero sí recordarle y aunque no sé si podrá escucharme, yo sigo conversando con él.

Ya me lo decía mi padre:

– Eres muy cabezona, hija

– Y sigo siéndolo, papá.

¡Feliz día del Padre!

Foto: Imagen de MJ Jin en Pixabay

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12 Comentarios

  1. Venimos sin manual de instrucciones y nos vamos sin él. En el camino de la vida se dan los aprendizajes entre los puntos de vista que divergen pero que se unen y surge la sabiduría de la madurez.

    Siempre estarán con nosotros aunque no veamos su presencia física pero si la del alma.

    Un abrazo gigante!

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  2. Bonitas tus palabras. Gracias.
    Así es, y lo bien que nos vendría ese manual, en muchas ocasiones.
    La juventud reniega de la madurez y sin embargo, es esta la mejor etapa de la vida. Es injusto que cuando más sabes es cuando menos tiempo de vida tienes para poder aplicar lo que sabes.
    Por todas esas almas que nos acompañan en nuestro camino de la vida. ¡Feliz Día y un abrazo fuerte!

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  4. Así es Amaia, hay que hacerse mayor para darnos cuenta de muchas cosas. La vida, a veces, es sencilla y las personas la complicamos, otras es complicada y dura de por sí. Pero de eso se trata, de aprender a vivir.
    Abrazo y gracias por tus palabras!

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  9. Hola, Mayte!!
    En estos casos nunca sé qué decir. Con un padrastro que no fue un padre para mi, todo lo contrario y con cosas que no puedo contar… un padre biológico que nunca ha querido saber de mi ni tan siquiera ahora que ya soy adulta solo me queda decir que al menos, él te quería. Me duelen mucho los días del padre. Yo no sabía qué cara poner a mi padre, imaginaba cómo sería ser que te quisiera, cómo sería eso de decir padre o papá. En fin, aun hoy me duele mucho. Mi madre es es mi padre. Supongo que no puede ser fácil perder a alguien querido. Un fuerte abrazo y besos al cielo. Emotivo post.

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    1. Piensa que tienes a tu madre que te quiere, y su amor es lo más importante y lo que debes recordar y en ello debes centrarte. Lo de menos es si existen dos figuras o una. No todas las familias son iguales y uno no es más feliz o menos feliz por tener una madre y padre o sólo una madre o sólo un padre, o dos madres o dos padres. La familia tradicional es algo cultural y el amor es universal. Un abrazo muy fuerte, Keren!

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